Me seco la cara con el borde de la blusa , a falta de toalla. Me siento en el escalón que sube a las cabinas, y miro al fluorescente del techo. Pronto tendré que irme, otra vida me espera fuera de este pequeño refugio. Pero mientras eso pasa vengo aqui a evitar el abandono
Recuerdo muchas veces a quien llege a ver alguna vez...
ResponderEliminarY que mas podemos hacer cuando no sabemos de ellos y de repente nos llega el don de decir esto ya paso...
En fin no hagas caso a mis comentarios locos.
Saludos